EXALTACIÓN

19 de abril de 2012

Dame dame dame
más motivos tantos suficientes
para ponerte ponerte ponerte
entre mis manos bajo mi cuerpo sobre mi cuerpo
una y otra vez una y otra vez
frenéticamente.

Dame las...
Dame las...
Dame las...
causas bastantes de excitación para el alma
abre las...
abre las...
abre las...
puertas de tu boca, las que llevan al fondo
de tu mar tan inmensa,
la contenida en tu cándida verde mirada,
la razón que mi semilla censa
cuando tu rosa tersa
turgente me halla desnudo en medio de tu calma,
cuando mi savia es palabra en tu seno tensa.

Succiona de mi verso el jugo,
exprime mis ansias de diálogo en tu boca apretada,
encierra en tu vientre el ave de mi libertad,
átame a tu voluntad, haz de ti mi yugo,
transforma mi poesía en coto de caza,
casémonos entre acechanzas de promesas de verdad;
persígueme, esconde bajo mi piel las uñas de tu trama,
enrédame con la soga de tus piernas y luego
ásame sobre ti del modo que te obligo
al calor de este fuego
el que ya me funde en tu mi mundo hogar ombligo.