Poema regalado a una musa muy especial por motivo de su cumpleaños. Pocas como ella de agradecida.
24 de febrero de 2012
Cuántas cosas inútiles
escribimos los poetas,
al menos a los ojos de aquellos
que toman la vida
en función de pesos y medidas,
de valores contantes y sonantes.
Los poetas somos una especie
rara avis de floristas,
unos armadores de buqués
formados con palabras,
decorados con puntos y comas,
salpicados con húmedos silencios
y de tallos enunciados
hasta el corte con que, sesgados,
los ahogamos en la mar
de la nostalgia
o en la fresca laguna
donde halla florilegio la esperanza.
Son tan inútiles los versos
como pétalos de rosas deshojadas
como voces de putas transformadas
como damas en botón recién amadas.
Son tan inútiles estos
de papel mis besos
como decirte que te amo
alejado de tus labios tersos.
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